El estrés es un padecimiento de salud que no es para nada popular entre la población, pero que lo padecen en su gran mayoría las personas en la actualidad. En cuestiones laborales, existe el burnout (que es el estrés laboral), que afecta a miles de trabajadores sin importar las edades.
El síndrome de burnout define un padecimiento que se manifiesta a través del cansancio crónico, dolores intensos de cabeza, musculares, de cuello y espalda, así como insomnio y que afecta de manera importante el rendimiento y productividad laboral pero, sobre todo, la calidad de vida.
Por ello es importante contar con algunos consejos que permitan evitar que lleguemos a tal punto. Ten en cuenta estos 5 tips que te ayudarán a sacarle la vuelta y tener una semana más agradable:
1. Programa
Realiza un listado de todas las actividades que deberás cumplir durante tu semana (de las que están seguras) y en base a ello programa, distribuyendo por horarios, días y/o prioridades. Parece complicado, pero si lo logras, ¡funciona! Investiga respecto a cualquier persona exitosa y descubrirás la importancia que tienen en tener un horario. Para empezar, te permite tener un mejor control de las situaciones, muchas veces no hacerlo hace que tus actividades te rebasen.
2. Un hobbie
Ya que hablamos de control, cuando se empieza a perder, siempre es buen momento tener un refugio emocional. Es ahí donde alguna actividad que disfrutes, un hobbie, algo que te gusta hacer será de gran ayuda. Relaja tu mente, baja los niveles de estrés y ponte de buen humor. No importa lo que sea, cine, baile, salir con tu pareja o amigos, videojuegos, armar rompecabezas ¡lo que sea! Tener una actividad de este tipo antes o después del trabajo te permitirá tomar el control de tu persona.
3. Divide tus objetivos en pequeñas metas
Si piensas en acabar todo de un solo jalón te abrumarás (y no es lo que queremos) y al final no podrás resolver lo más importante. Entonces, genera una estrategia que defina muy bien tus grandes objetivos o prioridades, y esos, divídelos en pequeñas metas que te permitan acelerar los procesos e incrementar tu productividad para que de a pocos puedan ir avanzando.
4. ¿Estás en lo que debes?
Acumular actividades o hacer varias no te hace más eficiente o productivo, por el contrario, muchas veces saturar tus tiempos agrega más estrés del que deberías tener por una jornada o semana de trabajo. Por ello, cuando vayas a aceptar una actividad o evento adicional al que está marcado en tu lista original pregúntate, ¿estas actividades sirven a mis objetivos? Si la respuesta es no, tal vez sea mejor compartir la responsabilidad o, si no puedes ignorarla, entonces reorganiza en ese momento tus prioridades para que no termines sofocado con el estrés.
5. Tercera persona
Aunque no lo creas, un reciente estudio realizado por la Michigan State University y la University of Michigan, revela que hablar de uno mismo en tercera persona es una técnica simple que puede ayudarnos a luchar contra estrés. El estudio mostró que, esencialmente creamos distancia psicológica de la situación estresante, lo que permite controlar mejor las emociones negativas.
Alexandra Correa
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