El alcance de internet y el uso de las redes sociales, combinados con el aumento de violencia hacia la mujer, han contribuido a que el acoso virtual se convierta en un problema creciente. En esta era digital ya no existen fronteras entre las personas y esto ha permitido que la violencia online aumente tanto en el Perú como en el mundo.
Estadísticas internacionales muestran que el 80% de las personas agredidas virtualmente somos mujeres* y que los acosadores no solo son terceras personas o extraños, muchas veces son las ex parejas, enamorados, novios o esposos. El acoso virtual no está desligado del acoso común en muchos casos y al igual que otros tipos de violencia, la violencia cibernética afecta enormemente la vida de las víctimas y se presenta de diferentes formas.
El acoso virtual está relacionado con amenazas de violencia, discursos de odio o ofensas en línea con mensajes no deseados. Pueden darse en forma del envío repetido de correos electrónicos, mensajes despectivos enviados por redes sociales, mensajes groseros e insultantes por Whatsapp y llegar hasta compartir información o videos de carácter personal. Es una forma de violencia, que afecta el desarrollo de la personalidad de las víctimas y que hace sentir a los acosadores, que este tipo de acoso no será castigado.
El acceso a Internet se está convirtiendo en una necesidad, por esto, es importante garantizar que este espacio público digital sea un lugar seguro para todos. Para asegurar esto, desde hace unos meses en el Perú, el Ministerio de la Mujer ha lanzado una plataforma virtual para informarnos acerca de lo que es el acoso cibernético llamada www.noalacosovirtual.pe. Ahí se pueden hacer consultas, presentar denuncias e informase acerca de este tipo de acoso que cada vez aumenta y al que a veces tratamos de prestarle poca importancia, desconociendo que actualmente existen leyes que nos amparan.
Por otro lado, debemos controlar el nivel de privacidad de nuestras redes sociales, conocer las herramientas que usamos y aprender a bloquear a personas específicas si lo necesitamos y sobre todo entender que el acoso virtual puede tener graves consecuencias, así que lo mejor es denunciarlo.
*Fuente: (WiredSafety), revisado el 23 de octubre 2017.
Mayo Tejada
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